División de Estudiantes Primaria
Con miras a la llegada del siglo XXI, y confiando en el gran potencial de los jóvenes, el Presidente Daisaku Ikeda funda la División de Estudiantes Primaria en 1965. Él relata que el desarrollo que tenían las Divisiones Juveniles de ese tiempo era impresionante y lograba inspirar a los más pequeños de la organización. Los jóvenes eran “el rostro de la Soka Gakkai. Los más jóvenes admiraban a sus mayores. Cuando se les preguntaba qué les gustaría ser cuando crecieran, muchos contestaban: ¡Un integrante de la División Juvenil Masculina! o “¡Una miembro de la División Juvenil Femenina!”
En una ocasión el Presidente Ikeda dijo: “cuando pensamos en el futuro de Japón y del mundo, se torna claro cuán crucial es el modo en que educamos a los estudiantes desde sus primeros pasos en la escuela. La misión de la Soka Gakkai es ofrecer un modelo para esto, y será una de las funciones que cumpliremos en la sociedad.”
Luego, estableció las guías eternas de la División de Estudiantes Primaria:
- Primero, mantener una práctica consistente en el Gongyo.
- Segundo, esmerarse en los estudios.
- Tercero, tener una buena asistencia a la escuela.
- Cuarto, no preocupar a los padres.
- Quinto, ser recto, fuerte y alegre cada día.
En nuestro país, la lucha inició en la primera visita del Presidente Ikeda a Panamá, cuando dos damas japonesas, Sra. Keiko y Sra. Shimizu, tomaron el liderazgo del grupo de niños que en ese entonces eran conocidos como los “Pequeños Pioneros”. Posteriormente, es la División de Educadores que queda a la forja de los más pequeños y en el 2003 asumen los líderes de las Divisiones Juveniles junto a la guía del Departamento de Estudio. Este cambio fue la preparación para la fundación de la División de Estudiantes que se realizaría el 21 de Noviembre de 2004.
No ha sido una lucha fácil, pero teniendo siempre como guía las directrices de Ikeda Sensei sobre la importancia de la división de estudiantes los jóvenes han seguido a la vanguardia. En la División de Estudiantes Primaria los jóvenes tienen el reto de guiar y desarrollar al máximo el potencial de sus integrantes cumpliendo las expectativas de Sensei de aquél momento en 1965 de ser un ejemplo para los más pequeños.